Los mandalas son más que círculos y figuras geométricas coloridas, son más que una moda. Los mandalas son una expresión artística mediante la cual, la persona que lo realiza, logra una conexión con su espiritualidad.
Origen de los mandalas
Mandala o mándala, vocablo de origen sánscrito que significa rueda-disco-círculo. Fueron creaciones usadas básica e inicialmente por las religiones hinduista y budista. Rememoran el macro y microcosmos, y su concepción estuvo ligada siempre al ámbito espiritual.
Según la antigua cosmología budista, los mandalas son la representación figurativa y ejemplar del universo.
Su origen ancestral se remite a la India, así como su nombre proviene de la lengua sánscrita. Mandala o mándala, rueda o círculo. Por eso su forma, inicialmente era circular. En la actualidad, podemos verlos en diferentes formas y colores.
Tal como mencionamos anteriormente, su origen se da en la India. Pero prontamente su uso se propagó a las distintas culturas orientales. Así como también a las indígenas americanas y a las aborígenes australianas.
Uso de los mandalas
Inicialmente, los mandalas tenían un uso relacionado directamente con ritos o ceremonias de tipo religioso o místico. Eran usados en decoración de templos como instrumentos de meditación. De igual forma, fueron usados como amuletos para ahuyentar a los malos espíritus.
Actualmente, además de la connotación espiritual que tienen de por sí, los mandalas son herramientas usadas como terapias de meditación y relajación. Así como también podemos verlas como hermosas piezas decorativas de nuestros espacios.
En primer lugar, la elaboración de los mandalas implica concentración para su creador. Seguidamente de una conexión especial que le ayuda en su desarrollo personal.
De igual modo, los también han sido relacionados con terapias de meditación y sanación.
Es decir, los mandalas además de constituir una hermosa pieza ornamental, poseen también un sentido espiritual. Representan un canal para que quienes los dibujan o crean, hallen el equilibrio energético, logren su crecimiento personal, haciendo uso de la concentración y meditación.
Por esta razón, se ha vuelto un tanto popular los cursos y talleres para “aprender a dibujar mandalas”. Muchos de ellos ofrecidos con fines terapéuticos.
Significado de los mandalas, según sus formas y colores
Según sus formas
Como ya dijimos anteriormente, el término mandala se refiere a círculo, al universo. Originalmente, eran circulares. Sin embargo, ya se ha popularizado la implementación de otras formas para su elaboración, pudiendo observarse mandalas con múltiples formas geométricas.
Asimismo, su forma también dependerá de la cultura que provenga. En el caso de la hinduista, resaltan los yantras lineales, y en la budista, las figuras como tal.
En su estructura, los mandalas se dividen de acuerdo a los puntos cardinales, dividiéndose en varias secciones.
Veamos entonces, algunas de las formas comúnmente usadas en la creación de mandalas y sus significados:
- Círculo: Cosmos-perfección-movimiento-cambio. La forma circular, se refiere al verdadero YO, a lo absoluto, a nuestra seguridad.
- Cuadrado: Equilibrio-energía-entusiasmo. Refleja la estabilidad.
- Triángulo: Vitalidad-transformación. Se relaciona con el agua, con la plenitud, la pasión.
- Cruz: Cielo/tierra-vida/muerte-consciencia/inconsciencia). Tiene que ver con la unión de los opuestos, con las diferentes direcciones y la toma de decisiones.
- Estrella: Libertad-salvación-imaginación. Es la perfecta representación de la espiritualidad.
- Pentágono: Tierra-agua-fuego-metal-madera. Se le relaciona con la inteligencia, el poder. Representa la silueta humana.
- Espiral: Vitalidad-flujo energético-curación. Tiene que ver con las energías de índole curativo.
- Laberinto: Búsqueda. A través de esta figura, se muestra la necesidad de hallar el centro interno.
- Mariposa: Transformación-evolución. Significa la muerte y renovación del espíritu.
- Corazón: Felicidad-unión-amor-alegría-amistad. Representación universal de las emociones.
Según sus colores
Además de las formas que le constituyen, los mandalas también tienen un significado especial acorde con el color predominante. Hablemos aquí, de los principales colores y su significado:
- Amarillo: Optimismo-alegría-diversión-simpatía-inteligencia-innovación. Refleja la energía y felicidad.
- Azul: Paz-tranquilidad-fidelidad-verdad-armonía-contemplación-sinceridad. Es el color relacionado con el progreso y la libertad.
- Rojo: Pasión-energía-valor-deseo-sensualidad-fuerza. Refleja la impulsividad, así como la ira, rabia y lo prohibido.
- Verde: Esperanza-equilibrio-estabilidad-rejuvenecimiento. Representa el amor por lo natural.
- Morado: Misticismo-sensualidad-poder-autoridad-manipulación. Es el color de la espiritualidad, de la contemplación por excelencia.
- Naranja: Optimismo-entusiasmo-calidez-fraternidad-vitalidad-energía-éxito. Es el color de la creatividad.
- Rosado: Sensibilidad-calma-gratitud-amistad. Representa lo dulce y delicado.
- Gris: Orden-paciencia-calma. Refleja el aspecto serio de la vida.
- Dorado: Claridad-vitalidad-sabiduría-lucidez. Refleja el mayor nivel de perfección espiritual.
- Plateado: Bienestar-capacidad extrasensorial. Se le relaciona con capacidades de índole psíquico y como un estabilizador de las emociones.
- Blanco: Inocencia-simplicidad-optimismo-purificación-larga vida. Representa lo limpio y puro.
- Negro: Profundidad-poder-silencio-misterio-sobriedad. Además de la independencia, también representa el desánimo y la tristeza.
Los mandalas y las diferentes culturas
Los mandalas fueron usados por los budistas, básicamente para la meditación. Mediante la contemplación de sus diversas formas, alcanzaban un estado de calma plena, con la mente en blanco. Lograban crear una conexión única entre su ser y la divinidad.
Por esta razón, los mandalas son reconocidos como un espacio energético. Asisten al hombre en la búsqueda del equilibrio de su espíritu y la purificación de su alma.
A pesar que sus orígenes se remontan a la India, también podemos ver su incursión en otras culturas. Iniciando con las culturas hinduista y budista, pasando por la cristiana medieval, comunidades andinas, indígenas, entre otras.
Tal es el caso de los laberintos que podemos observar en las iglesias góticas, la chacana o cruz andina, los atrapasueños indios, por mencionar algunos.
En la cultura occidental, fueron incluidos como método terapeútico para lograr la individualidad en los seres humanos, por el psicoanalista Carl G. Jüng.
Asimismo, existen ciertos rituales mágicos, donde utilizan los círculos con el fin de separar espacios sacros de los profanos.
Colorear mandalas
Colorear mandalas ha sido una actividad que ha proliferado mucho en la actualidad. A tal punto, que ya es común encontrar en cualquier recinto comercial o en sitios web, libros y compilaciones de mandalas para colorear. En material dirigido a todas las edades.
Además de encontrarlos en dibujos para colorear, los mandalas son realizados en y con diferentes materiales. Tal es el caso, de mandalas realizados con hilos, con técnicas diversas de pinturas. Y sobre superficies varias, como madera, lienzos, telas, espejos, y más.
Beneficios personales
Se cree que además de ser una excelente terapia de relajación, también incentiva y despierta la creatividad de las personas. Elaborar o colorear mandalas a llega a convertirse en una afición muy agradable y saludable.
Son muchos los beneficios de los que se llegan a disfrutar con la práctica frecuente de la creación, elaboración o pintura de mandalas. Algunos de ellos son:
- Meditación activa: en la realización del mandala, trabajan tus manos mientras tu mente entra en un estado de meditación
- Conexión interior: La concentración y la meditación te conectan con tu yo interior y comienzas a escuchar tus propios pensamientos
- Desarrolla la paciencia y la concentración: Su práctica frecuente favorece al desarrollo de la paciencia y la concentración
- Aumenta la autoestima: Desarrollas la confianza, seguridad y mejora la visión y aceptación de tu ser
- Terapia antiestrés: Funciona bastante bien como una herramienta relajante en la disminución de los niveles de estrés personal
- Aumenta la creatividad: Dibujar o pintar mandalas te conectan con tu imaginación aumentando tu creatividad
- Mayor consciencia: Estimula capacidades personales y activa los sentidos
- Mejora la relación con el mundo exterior
- Rompe con la rutina y monotonía
- Terapia de sanación física y emocionalmente
Independientemente de la forma o color que escojas y la razón que tengas para realizarlos, los mandalas son una hermosa manera de dejar volar tu imaginación, nutrir tu espíritu y decorar tus espacios.
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Muy interesante la información, muy buen contenido!
les comparto un sitio donde mezclan los mandalas con los ojos de dios de la cultura huichol
https://naguf.com/producto/hermoso-mandala-con-2-ojos-de-dios-arte-huichol-en-base-huacal/
Bastante útil el contenido claro y conciso