El Rap Ruso está suelto en plaza, con exponentes como Big Baby Tape, el rapero revelación 2019 que tiene mucho que enseñar acerca de cómo saltar desde lo underground a ser un ícono del rap, sin invertir un duro.
Con poses a lo “Anarquía 99” de la película Triple X. Irreverentes, deslenguados no tienen reparos al momento de mostrar lo que sienten y piensan, claramente la faja se rompió en Rusia y aquí te presentaré los mejores exponentes del género, te aseguro que después de esto no dejarás de escucharlos.
Cómo le va al Rap en Rusia
De forma muy curiosa, la cocina del “Flow”, entró al país a finales de los 90s con un “baita” del icónico tema de “Rappers Delight”, igual como pasó con Latinoamérica. Desde entonces el producto que se extendió, era una maqueta de cascarón ruso con relleno gringo. Encasillado en modelos americanos gozaba de cierta audiencia, pero no era tomado muy en serio.
Hasta la última década, en que el rap de este país sufre un subidón alucinante. Así aparece Big Tape, un día dice: ¿vamos a hacer rap? y al otro, 300 millones de reproducciones en la plataforma VK, con la soltura de confesar que no invirtió un duro en la promoción de su música.
Pero no todo es color rosa para la música urbana en Rusia. Su carácter contestatario expone todos los trapos de la sociedad y la política de su país. Y luego está, el sexo, las drogas y el alcohol… quizá en este lado del mundo, sean temas que pasan delante de nuestras ventanas sin que se nos quite mucho el sueño, pero en Rusia, no es así.
Cancelan conciertos, suspenden funciones y una serie de baches dentro de los permisos y la organización que se las pone muy difícil a la escena rusa. Aun así, la onda expansiva es imparable.
El Rap Ruso y Big Baby Tape
La primera vez que escuché a este tío pensé en lo bien que se debe entender con su DJ, sin saber que se trataban de la misma persona.
Su estilo es una manzana roja envenenada con el más rico flow. El DJ Tape cocina “loops” y “simples” de la vieja escuela, sazonados con cadencias de trap.
Tiene 19 años, nació en Moscú y su verdadero nombre es Egor Olegovich Rakitin. Actualmente la escena rap del país crece libre en la escena underground y al estilo “hágalo usted mismo”, tal es que a su corta edad no solo podemos hablar de él como rapero sino también como el ingeniero creativo y productor de su propia música.
Creció como la mayoría que estamos metidos en el género, seamos consumidores o autores, escuchando a los referentes básicos de Estados Unidos : 50 Cents y Gucci Mane. Se hizo con la fórmula de los grandes: trabajar sin descanso. Le dio duro a las mezclas y al rap desde la adolescencia, ya por ese entonces tomó el apelativo de Dj Tape.
Desde su primer mixtape en 2017 hasta el lanzamiento del disco Dragonborn en el 2018, no ha hecho más que llamar la atención de raperos que ya se han granjeado fama en el medio como Face o Pharaoh, y coleccionar cada vez más seguidores. Destaca la canción “Gimme the Loot” con 3 millones escuchas sólo en Spotify.
En su último trabajo, encuadrado en el EP: “Argumentos y Hechos”, podemos apreciar temas como Balaclava, Surname o Weight, con bases de su propia autoría.
La Old School en el Rap Ruso
Oxxxymiron (Мирон Янович Фёдоров): Ya mayorcito en el área y el más mediático, a diferencia de sus contemporáneos en la nueva ola del rap ruso, que han ganado bastante audiencia sin muchos pelos en la barbilla. Tiene lo que a los otros les falta, experiencia y peso pesado.
Su formación está enriquecida por tres naciones. Siendo todavía pequeño, su familia emigró a Alemania en donde vivieron hasta inicios de su adolescencia, en que ya empezaba a dar muestras de su talento escribiendo letras y cantando rap bajo el seudónimo de “MC Mif“ Luego se mudaron al Reino Unido, donde estudió Filología Inglesa del Medioevo en Oxford y le diagnostican conducta bipolar (es de los míos…).
Su estilo es rudo y sin pelos en la lengua, explica lo de las “xxx“ de su nombre como una alusión al lenguaje soez que usa en sus composiciones. Pero lo que realmente le hace un grande es que se trataría de un “battlerapper” invencible reconocido en el magazín Hip Hop, como el mejor del mundo.
Puedes mirar aquí unas de sus batallas y ver como literalmente, aniquila a sus competidores.
Otros exponentes de la New School rusa
Faraón: 22 años y todo un referente del rap experimental en su tierra. Sí, tiene de indie no se le puede negar, pero también es de los que cree que hacer rap no es para cualquiera.
Es autodidacta 100%, realiza sus propios videos y si crees que esto es fácil es porque no sabes que, en Rusia, hacer música independiente es labor heroica ya que la industria musical no tiene alas para el libre progreso.
Busca crear un material ruso auténtico, sólido en estilo, escapando de la corriente alienada con que se inició el rap en su país, o de los cánones nacionales preestablecidos. Prueba de ello son los temazas: “ДИКО НАПРИМЕР”, tanto de calidad acústica como estilo visual únicos en su formato y “Мой кайф”, denso, feroz y bien logrado.
Face: su estilo es muy maduro pese a su corta edad. Ivan Timofeevich Dryomin tiene 22 años y 5 álbumes en su haber. Goza de fuerte aceptación entre los jóvenes rusos.
En ego nadie le gana a este chico, se proclama mejor que todos los raperos altamente mediáticos que conozcas y tiene tatuajes en la cara con las palabras “odio”, “amor” y “numb”.
Debido al lenguaje explícito de alusión al sexo y drogas, tiene muchos problemas con la ley. Siendo otro de los artistas rusos del género al que las autoridades no miran con ojos tiernos.
Escucha: СПАСАТЕЛЬНЫЙ КРУГ
Hay Rap Ruso Big Baby Tape para rato…
A diferencia del producto enteramente comercial que suele ser una aberración colectada y encajada en un formato repetido, de eficacia comprobada. El fenómeno musical ruso se hizo solo, alejándose del mainstream, pero fiel a las formas tradicionales de la cultura hip hop. Brota underground de las calles, desconoce a las disqueras, rechaza la empresa.
El Kremlin tiene los pelos de punta. Ya han hecho de todo, cancelar conciertos, gestionar tácticas persuasivas para orientar la música urbana a cauces más “saludables” según las restricciones morales en las que se moviliza la “libertad de expresión” rusa. Han llegado al punto de encerrar a uno de sus exponentes en evidente desesperación por acallar un concierto improvisado en medio de la calle.
Pero La necesidad de expresión crítica es inherente a la cultura y una de las formas artísticas más arraigadas del ser humano. Y los exponentes rusos son muy jóvenes, esa energía no se acalla con deporte…
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