Si tienes interés en el reciclaje, ¡este post es para ti! Te mostraremos cómo reciclar plástico en casa y sobretodo, hacer uso del plástico que hasta ahora sólo veías como desecho. Te sorprenderás del universo de posibilidades que se abren para crear nuevos objetos de gran utilidad con tan sólo activar tu ingenio y valerte de algunos otros implementos sencillos.
Botellas de agua, jugo, leche y gaseosas, envases plásticos de detergentes, yogures y otros alimentos, bolsas de mercado, sorbetes, tapas de botellas, papel de burbujas, redes contenedoras de frutas y vegetales, envoltorios de comida y de otros productos, son de los objetos desechables elaborados con ese polímero que prevalecen entre la basura, luego de haber sido destinados a un solo uso.
Como resulta casi imposible disminuir la producción y el consumo de plástico en el mundo, pues cada día se expande y diversifica más su uso industrial y cotidiano, debido a su capacidad para resistirse al deterioro, su bajo costo, la simplicidad de su elaboración, sus cualidades impermeables, entre otras, han surgido maravillosas ideas para contrarrestar o evitar tantos daños producidos por el plástico desechado. Entre ellas resalta el reciclaje casero.
El plástico, el cáncer que destruye el planeta
El plástico, es uno de los desechos sólidos imperecederos más abundantes en el mundo contemporáneo. Cantidad de objetos de uso cotidiano manufacturados en este material, son descartados en el planeta, llegando a los vertederos de basura para sumarse a la infinita marea contaminante que ocupa grandes superficies terrestres, así como profundidades marinas y oceánicas, sin posibilidades de biodegradarse fácilmente, tardando cientos de años en descomponerse naturalmente.
Y es que diversos estudios científicos ambientalistas han demostrado que apenas el 10% del plástico producido en el planeta es reciclado, pese al nocivo impacto que causa sobre los seres vivos al convertirse en desperdicio, descomponerse, ser incinerado o pasar por otros procesos que lo que hacen es acelerar la liberación de todas las sustancias químicas tóxicas de este material, quedando además con frecuencia desperdigado en el ambiente.
La honda de las tres R
Tú muy bien puedes contribuir con el cuidado del planeta entrando en la honda de las tres “R”: Reducir, Reutilizar y Reciclar. Aunque parezca que la conciencia de una sola persona no produce efectos a gran escala, ten la seguridad de que serás ejemplo para muchos si conviertes esta triada en prácticas habituales.
Lo ideal es Reducir el uso de este material, lo que puedes lograr por ejemplo, utilizando bolsas ecológicas de tela para ir al mercado. Sabemos que igual mucho de lo que compramos viene en su envoltorio de plástico, pero en algo contribuyes de esta forma.
Reutilizar es otra consigna importante, ya que supone evitar el descarte de objetos de plástico y volver a darles uso, alargando su vida útil. Siguiendo con las bolsas, lo ideales que vuelvas a utilizarlas en otra compra; si se trata de botellas plásticas de bebidas puedes reutilizarlas para guardar otros líquidos. No se recomienda que rellenes de agua potable u otra bebida para tu consumo, ya que puede afectar tu salud, pero si, por ejemplo, para regar las plantas o poner agua a tu vehículo.
La tercera alternativa es Reciclar, es decir, transformar los objetos plásticos para destinarlos a nuevas finalidades. Esta opción se ha convertido en los últimos tiempos en una estupenda estrategia creativa, por lo que personas de todas las edades, gustos e intereses se han inclinado por esta práctica ecológica. ¿Pero cómo lo hacen? Conoce 4 formas de reciclar plástico fácilmente en casa:
4 formas efectivas de reciclar plástico en casa
1.- Aprovecha tus destrezas para las manualidades
Esta es una de las prácticas más divertidas y educativas, en la que el ingenio y la creatividad se ponen a valer. De acuerdo a lo que elijas confeccionar, requerirás de implementos sencillos como pegamento para plástico, cinta adhesiva, cordones, alambre, tijeras, cutter o brocas, pintura, una fuente de calor para derretir y hacer maleable el material, entre otros recursos que seguramente te serán indicados en las múltiples páginas o blogs, a través de tutoriales que actualmente se consiguen en Internet dedicados al tema.
Puedes hacer infinidad de objetos de uso cotidiano con tan sólo transformar botellas u otros envases plásticos, por sólo mencionar algunos ejemplos: materos, portalápices, lámparas, macetas para plantas, juguetes para huerto vertical, flores decorativas, regaderas de plantas, cortinas, palas de jardinería, contenedores de alimentos sólidos o pequeños objetos, candelabros, bisutería, etc.
Consejos para reutilizar en casa:
Con las tapas de refresco u otras de plástico puedes hacer bolsos, cortinas, contenedores, juguetes para niños, lámparas colgantes y de mesa, y espectaculares murales creativos llenos de colores y tamaños. También puedes decorar otras superficies, como mesas, marcos de espejos, hacer manteles y muchas cosas más. Los niños disfrutarán haciendo composiciones, figuras de animales y gran variedad de actividades manuales divertidas, combinando las tapas de plástico con estambres de colores, cartón o cartulina, pegatinas, etc.
Con las bolsas plásticas puedes crear cosas increíbles también. En el mundo de la moda y el fashion existen geniales diseños de bisutería: brazaletes, collares y zarcillos. Si te gustan los accesorios tejidos, podrás sustituir el hilo de algodón tradicional por bolsas plásticas para hacer carteras, bolsas para compras, cinturones, pamelas de playa, sandalias, entre muchas otras hermosas y prendas únicas en diversas técnicas como el crochet.
Los envoltorios de golosinas o snaks son un magnífico recurso reciclable para hacer originales diseños de carteras, bisutería, billeteras, como los antes descritos con bolsas, pero además puedes aprovechar su colorido y material resistente e impermeable para hacer diseños súper creativos de manteles individuales o completos para tu mesa, portavasos, persianas, servilleteros, delantales de cocina, pantallas para lámparas, estuches para lentes y celulares, y un sinfín de objetos útiles.
Encontrarás interesantísimas ideas para darle utilidad a todo ese plástico del que antes hubieses prescindido. Aprovecharás tus destrezas manuales y despertarás gran conciencia ecológica. Podrás desarrollar brillantes propuestas educativas para estimular la creatividad de niños y jóvenes, así como su sensibilidad ante el cuidado del planeta aprendiendo sobre el reciclaje.
2.- Construye tu propia planta para reciclaje de plástico
No han sido pocas las personas y movimientos sociales en el mundo que se han preocupado por la contaminación ambiental que produce la industria del plástico y su posterior descarte por los consumidores. Algunos se han visto impulsados a desarrollar iniciativas para buscarle una salida al problema. Entre ellos resalta la propuesta que ideara en 2013 Dave Hakkens, replicada por muchos hasta la actualidad. Se trata de una planta recicladora muy sencilla, de fácil elaboración casera.
Crea tu planta recicladora en casa:
Hakkens presentó como proyecto final de grado en la Academia de Diseño Eindhoven, de los Países Bajos, su Precious Plastic. Este proyecto, nutrido también por algunos de sus compañeros de estudio, consistió en la creación de una máquina para procesar plástico triturándolo y convirtiéndolo en una materia maleable, con variados diseños y colores con la cual se pudieran manufacturar nuevos objetos.
En la página oficial del creador así como en múltiples videos tutoriales que circulan en Internet, se encuentran los detalles sobre su proyecto (planos, descripciones, ejemplos, etc.), además de técnicas para elaborar artículos y recomendaciones para desarrollar emprendimientos a partir de este espíritu ecológico. Te contagiará el entusiasmo de tantas personas que alrededor del mundo se han animado a construir su propia máquina para generar materia prima a partir de basura plástica.
La planta se compone de cuatro partes modulares fáciles de armar con otros materiales reciclados como piezas mecánicas de automóviles, tornillos, clavos, entre otras piezas convencionales que podrán ensamblarse sin gran dificultad con un trabajo de herrería básico. Una trituradora, una compresora para moldeo y otra para moldear por inyección y un dispositivo extrusor para producir filamentos para impresoras 3D.
Sólo requerirás un espacio en tu hogar para disponer esta recicladora y hacer tu pequeña fábrica de objetos: macetas, cajas, manillas para puertas, platos, vasos, ¡y todo cuanto puedas imaginar!
3.- Contribuye con la recolección de plástico en casa
En caso de que no tengas tiempo o condiciones para dedicarle tiempo a las manualidades o a procesar el plástico, bien puedes hacer en tu casa un banco de recolección de desechos de este material para que luego sean aprovechados por otras personas. Para ello bastará con que dispongas de un contenedor amarillo adecuado para almacenar las cosas plásticas que descartes en tu hogar o recolectes, o simplemente unas bolsas grandes. Lo más importante es que las ubiques en un área limpia y seca para que se conserven mejor.
Puedes indagar sobre lugares que utilicen este tipo de recursos para el reciclaje, como escuelas o centros creativos, colectivos ecológicos. También puedes averiguar si la empresa del aseo que se encarga de recoger la basura cuenta con un depósito para este tipo de desechos para destinarlos a un buen propósito.
No pierdas la oportunidad de unirte a algún grupo de reciclaje a través de las redes sociales, pues seguramente podrás conocer personas o instancias que se interesen en el reciclaje de plástico y quizás puedes colaborar donando el material o participando en alguna actividad que organicen.
4.- Asigna nuevos usos a los desechos de plástico
Como ya te comentamos, la reutilización es una de las claves para el aprovechamiento del plástico sin muchas complicaciones. Lo que debes hacer es destinar los envases, las bolsas, envoltorios y demás objetos de este material a nuevas funciones. Los envases plásticos son muy útiles para poner en orden otras cosas. Botones, agujas, clavos, tuercas, prendas, monedas, rompecabezas, entre tantas pequeñas cosas que en ocasiones andan sueltas en casa y requieren de un lugar de fácil ubicación cuando las necesites.
Los envoltorios pueden servir por ejemplo para forrar cuadernos, regalos y otras superficies, Las bolsas siempre pueden volver a utilizarse si se conservan limpias y en buen estado. Los contenedores de líquidos pueden recargarse, por ejemplo, los envases de detergente puedes rellenarlos con el mismo producto. Estas son apenas algunas ideas, pero seguro podrás darle un buen uso a todo cuanto tengas de plástico desechable.
Excelente trabajo