¿Quieres conocer acerca de cómo acomodar tu entorno para que las energías fluyan correctamente? Entonces sigue leyendo. A continuación, encontrarás la información que necesitas para empezar a aplicarlo en tu día a día. ¿Qué es y en qué consiste el Yin y el Yang y cómo aplicarlo en la vida?
Ten en cuenta, que este símbolo se suele utilizar para representar la armonía y el bienestar a tu alrededor, lo que a su vez, conecta con tu paz interior, al igual que tu buen desenvolvimiento en ellos.
¿Qué es el Yin y el Yang?
El Yin y el Yang es un símbolo muy conocido en occidente. Entre sus facultades, encierra sabiduría y conocimiento milenario, además, representa el principio del taoísmo.
Ofrece, las herramientas necesarias para aplicar en la cotidianidad, en la casa, en el trabajo y en la vida en general lo necesario para estar rodeado de armonía, mediante una dinámica cambiante que se percibe a través de elementos opuestos, donde el fin es desprenderse de los extremos y encontrar un equilibrio.
¿En qué consiste el yin y el yang?
El Yin y el Yang, son parte de un principio religioso y filosófico. Están descritas como dos fuerzas que se repelen, pero que al mismo tiempo se complementan; siendo fundamentales en la esencia del universo.
El Yin contiene una fuerte asociación con la tierra, la pasividad, la oscuridad, la intuición y la feminidad. Mientras que el Yang, se vincula con el cielo, la expansión, la actividad y la masculinidad.
Son signos que únicamente pueden ser evaluados de manera comparativa, debido a que de forma absoluta no existe una cosa a la que se le pueda nombrar definitivamente “Yin” o “Yang”. Sin embargo, se trata de elementos que se necesitan entre sí y que no se oponen uno al otro, como es el caso del bien y el mal.
Significa, que se precisa la existencia de ambos para que haya un equilibrio, una armonía entre los diferentes fenómenos de la vida, como la fortuna y el bienestar en los entornos, en el bien interior y en como percibes el mundo a tu alrededor.
Teoría del Yin y el Yang
La Teoría del Yin y el Yang, indica que todo aquello que está en el entorno está constituido por dos fuerzas opuestas que al mismo tiempo se unifican en completo equilibrio, con el objetivo de beneficiar el cambio y a la vez, el movimiento de las energías.
Por lo tanto, la imagen que representa estas dos fuerzas, está configurada como dos ondas que se dividen dentro de un círculo, recordándote que la vida no está estancada, además, de representar el fluir de la energía y el despertar de la transformación y el cambio.
Incluso, en el centro de cada una de las partes se refleja un círculo del color opuesto, significando, que ningún ser humano puede verse a sí mismo en términos absolutos.
Lo que también hace destacar, que no es correcto ver la vida desde el extremo blanco o negro, sino identificando que todo es relativo y que cada circunstancia puede cambiar en determinado momento.
¿El yin y el yang y como aplicarlo en la vida?
Se realiza al comprender que ambos elementos opuestos desglosan la vida. Este principio es capaz de enseñar que todo aquello que es diferente, como lo bueno y lo malo, lo positivo y lo negativo, el amor y el odio, etc., en realidad tienen que ver con energías que contienen distintas vibraciones.
Todo lo que se cierra en el transcurso de la vida hace que simultáneamente se abran otras puertas, que comienzan el inicio del cambio. Por ejemplo, las energías con bajas vibraciones pueden transformarse en altas vibraciones, lo que te enseña a transmutar: en no apegarte a un hecho como si se tratase de algo eterno.
Te lleva por tanto, a comprender que cada circunstancia que se desarrolla en la vida, posee una semilla de su contrario. Por ejemplo, cuando te encuentras vulnerable por el miedo y en vez de interpretarlo como un sentimiento de debilidad, por el contrario te lleva a conseguir el valor necesario para enfrentarte a lo que más temes, aflorando tu verdadera fortaleza.
Asimismo, cada una de las dificultades que afrontas, puede servirte para encontrar una verdadera oportunidad, entendiendo que después de un final se abre un nuevo comienzo.
El Yin y el Yang y el Feng-Shui
La manera de entender cómo se relacionan el Yin y el Yang en los espacios según el Feng-Shui, es primero comprendiendo que el primero es la base del otro. En la práctica del Feng-Shui, se persigue la armonía en los espacios que transitas para una atmósfera adecuada.
Según esto, un espacio donde predomina el “Yang” sería todo aquel donde abunda el blanco, los colores brillantes, al igual que las paredes angulosas y ventanales grandes. Por ello, en un espacio como este, podrías llegar a sentir sensaciones de irritación y estrés. Un lugar donde te costaría sentirte tranquilo.
Pero, por el contrario, un hogar excesivamente “Yin” es considerado como un lugar con ventanas pequeñas, poca luz, colores opacos, etc. En él, podrías sentirse triste, deprimido, desanimado o con falta de vitalidad.
¿Cómo aplicar el Yin y el Yang en los espacios según el Feng-Shui?
Por tal razón, la manera de aplicar el Yin y el Yang en los espacios según el Feng-Shui, es tomando las medidas necesarias para combinar los elementos, y así crear un equilibrio.
Por ejemplo, con el caso anterior, si en una habitación de tu hogar hay un gran ventanal, resultando ser este espacio demasiado “Yang”, el remedio sería colocarle una cortina para combinarlo con un toque “Yin”.
Pero, si se trata de una habitación oscura por falta de iluminación o por colores opacos, lo que podrías intentar sería combinar esta decoración “Yin” con toques “Yang” aportándole una entrada de luz o elementos de colores cálidos. Con ello, no estarías modificando por completo el lugar, pero si acomodarlo a un punto de equilibrio.
Incluso, si existen formas cuadradas o angulosas, esta filosofía recomienda colocar formas suaves como parte del mobiliario para conseguir la armonía necesaria. La idea general es no irse ni aun extremo ni a otro, pero si procurar generar equilibrio y paz interior.
Consejos al aplicar el Yin y el Yang en la vida y en los espacios
El Yin y el Yang cómo aplicarlo en la vida: Para una zona equilibrada y llena de paz, es fundamental que esté ordenada y libre de objetos innecesarios. Por lo que si estás reorganizando tus espacios, intenta que así sea. No vacíes las habitaciones por completo, pero tampoco permitas la acumulación o el desorden.
Si deseas aplicar el Yin y el Yang en la vida y en los espacios, como se explicó anteriormente, coloca objetos que de manera intuitiva te generen tranquilidad y alegría, o tal vez alguna fragancia que logre liberar tensiones con su aroma y te lleve a un estado de serenidad y bienestar.
Ambas cosas te harán experimentar algo de lo que no podrás arrepentirte. Por ejemplo, según el Feng-Shui, queda estupenda una combinación decorada entre el marrón claro, el beige y el amarillo.
De acuerdo a lo que te hemos explicado, el Yin y el Yang cómo aplicarlo en la vida, es muy sencillo, solo debes ver en tu hogar cada espacio con detenimiento y así identificar donde están ambas energías y usar este análisis de acuerdo a lo que deseas lograr.