Descubramos juntos todos los beneficios de la melatonina, una sustancia presente de forma natural en nuestro organismo y producida por la epífisis, una glándula situada en el cerebro. Es esencial para la regularización del ciclo sueño-vigilia y para la relajación natural de las sinapsis, indispensable para conciliar el sueño.
Qué es la melatonina
Melatonina. Un nombre que también se ha hecho familiar gracias a la publicidad, que presenta este producto farmacéutico como la panacea para dormir bien. La melatonina tiene algo que ver con el sueño, pero antes de ser una pastilla “de venta libre”, es una hormona producida por nuestro organismo a través de la glándula pineal (o epífisis), situada en el centro de la caja craneal. Esta glándula recibe información de las neuronas de la retina y, cuando oscurece, comienza a producir melatonina, favoreciendo así el sueño.
De ello se deduce que la dificultad para conciliar el sueño o la tendencia a dormirse muy pronto, o incluso el insomnio, pueden deberse a una alteración de la producción de melatonina, en cuanto al horario, debida también a nuestros hábitos, en comparación con el horario convencional para conciliar el sueño. Por lo tanto, como parte de una vía diagnóstica dirigida a investigar los trastornos del sueño, resulta importante establecer en qué momento nuestro cuerpo segrega melatonina de forma natural.
La melatonina es una hormona producida por la glándula pineal
En concreto, los niveles sanguíneos de esta hormona aumentan durante la noche, con un posterior descenso durante el día.
Denominada la hormona del sueño, la melatonina es esencial para regular el ritmo circadiano y el ciclo sueño-vigilia. Además de favorecer el sueño, puede tener diversas funciones en la salud mental, la digestión y la presión arterial, entre otras.
De hecho, las concentraciones de melatonina son significativamente detectables en el líquido biliar, la médula ósea, el LCR, el ovario, los ojos, las células del sistema inmunitario y la piel. Su amplia distribución en el cuerpo humano sugiere, por tanto, una función biológica especialmente compleja para el organismo.
Cómo se regulariza la producción de melatonina
Esta importante sustancia se sintetiza durante las horas de oscuridad nocturna. La producción comienza en las primeras horas de la tarde, continúa durante toda la noche con picos en las horas centrales, luego disminuye en los momentos finales con la llegada de la luz del día, y finaliza completamente durante la mañana.
La producción de melatonina también cambia con la edad
Es muy baja en los primeros meses de vida, aumenta durante la infancia, alcanza su máximo en la adolescencia y luego disminuye con la edad adulta. Además del avance de la edad, puede haber otras causas que provoquen un descenso de la producción de melatonina en el organismo.
Muchas personas se ven obligadas a trabajar en turnos de noche, lo que altera el ritmo normal de sueño-vigilia. Incluso quienes viajan mucho, quizá cruzando bruscamente diferentes husos horarios, corren el riesgo de alterar sus fases de vigilia y sueño, provocando el jet lag.
Melatonina y envejecimiento
Las investigaciones sugieren que la melatonina también actúa como antioxidante, neutralizando los radicales libres altamente reactivos que dañan las células.
En los seres humanos, los niveles de melatonina disminuyen con la edad. Además, sus niveles se reducen sistemáticamente en el síndrome metabólico, las enfermedades cardiovasculares isquémicas y no isquémicas y los trastornos neurodegenerativos como el Alzheimer y el Parkinson.
Las investigaciones clínicas recomiendan una posible utilidad de los suplementos de melatonina en el tratamiento de la enfermedad de Alzheimer (sobre todo en las primeras fases de la enfermedad), las quemaduras solares (aplicación tópica) y la hipertensión.
La administración de melatonina a animales de edad avanzada contrarresta un número significativo de cambios relacionados con la senescencia. En los seres humanos, la melatonina es eficaz como cronobiótico y como agente citoprotector para mantener un envejecimiento saludable.
Propiedades de la melatonina
La melatonina tiene dos propiedades fundamentales: hipnótica y cronobiótica. La primera es capaz de inducir y mejorar el mantenimiento del sueño, mientras que la actividad cronobiótica sirve para sincronizar el ritmo biológico (es decir, nuestro reloj biológico interno) con el ritmo luz-oscuridad (reloj externo).
¿Cuándo segrega melatonina la glándula pineal?
Por lo general, el proceso comienza al anochecer, gracias a la información procedente de las neuronas de la retina. Es decir, alrededor de las 19.30-22 horas (para los niños de 19.30-21 horas), normalmente 2-3 horas antes de dormirse. La curva de secreción alcanza su punto máximo en torno a las 3-4 de la madrugada y luego cae a cero cuando se está despierto.
¿Cómo se dosifica?
La melatonina puede dosificarse tomando una muestra de sangre, a través de la orina o de la saliva. En la actualidad, el método más sencillo y validado científicamente es el de la saliva. Consiste en la recogida de 5 muestras de saliva a intervalos de 1 hora. La primera muestra se recoge a las -3 horas de la hora habitual de acostarse y la última a las + 1 hora.
¿Qué información obtendremos de la prueba?
El análisis de las muestras describirá el biorritmo del sujeto. Por lo general, en las personas que se acuestan a las 11 de la noche, el organismo empieza a producir melatonina a las 9. Las cosas cambian, por ejemplo, en las personas mayores que se acuestan muy temprano y cuya producción de melatonina empieza a las 6 de la tarde o en los jóvenes que se duermen muy tarde, con una producción de melatonina que empieza a última hora de la noche.
En estos casos, es necesario “reeducar” al sujeto a un ritmo sueño-vigilia más convencional mediante señales comportamentales. La dosificación de la melatonina adquiere entonces especial importancia en quienes padecen el síndrome del trabajador por turnos. La relajación es fundamental en este punto.
Buenos hábitos para conciliar el sueño
Cuando estés en la cama, evita utilizar aparatos eléctricos como smartphones y tabletas. Mejor lea un libro o beba una infusión relajante con extractos naturales que le ayuden a conciliar el sueño.
Prueba los suplementos de melatonina
Frente a otros remedios contra el insomnio, la melatonina es un ingrediente presente de forma natural en el organismo que puede influir positivamente en la calidad del sueño sin comprometer nuestras actividades diurnas. De hecho, al despertar, el cuerpo elimina de forma natural la melatonina residual, proporcionando al organismo la energía que necesita para hacer frente a las actividades diarias.
Basta con tomar 1 mg de melatonina por la noche antes de acostarse para estimular la conciliación del sueño, permitiendo un sueño profundo y continuo, evitando los despertares nocturnos que alteran nuestras fases normales de sueño.
¿Para qué trastornos del sueño está indicada la melatonina?
Todos aquellos trastornos que están relacionados con alteraciones del ritmo circadiano sueño-vigilia. Por ejemplo: síndrome de la fase retrasada del sueño o síndrome de la fase precoz del sueño, trastorno del sueño de los trabajadores por turnos, jet lag, síndrome del ritmo irregular de sueño-vigilia o ritmo no 24 horas. Pero la dosificación puede ayudar en casos de insomnio, especialmente en personas mayores de 55 años, y o en trastornos del sueño cuando también está presente una enfermedad neurodegenerativa.
¿Tomar melatonina puede conllevar algún riesgo?
Tomar melatonina es un tratamiento médico y, por lo tanto, tiene ciertas indicaciones. Utilizarla sin evaluación médica para algunos insomnios no da ningún resultado o puede contribuir a empeorar el insomnio si no se comprenden las causas.
En efecto, la ingesta de melatonina exógena puede modificar la secreción de melatonina endógena, alterando el momento de su producción y también su cantidad. Por una especie de equilibrio, disminuye no sin consecuencias sobre el descanso.
¿Has tenido dificultad para dormir? Este artículo seguramente te da pistas para entender la razones y las posibles soluciones. Debes dormir bien para tener una vida íntegra.